Las nuevas tecnologías no se pueden concebir sin el uso de una imagen, la imagen es un medio fundamental que transmite muchos conocimientos, una misma imagen puede ser muy complicada, ya que todo el mundo no la va interpretar de la misma manera, es decir, es considerada un discurso polisémico porque cada uno que la mire la interpretara de distinta forma.
La imagen puede dar problemas a la hora de utilizarla como un medio didáctico para los alumnos, ya que puede dar lugar a muchas opiniones diferentes. Por lo que a veces hay que llevar cuidado con el uso de imágenes. Una imagen puede dar lugar a que veamos dos cosas diferentes pero como regla general no podemos ver las dos cosas a la vez.
Se nos está vendiendo una imagen univocal, es decir, se trata de que todos veamos lo mismo. Ejemplo:
- La persona que hace la foto quiere que veamos lo que él ve, es decir, a mi alumno le voy a enseñar la imagen que yo quiero que vea.
- La imagen se vende como un traslado de la realidad a una realidad donde yo no puedo llegar, una imagen nunca es una realidad, es una percepción de la realidad por parte de quien ha hecho la imagen.
La realidad es tan compleja que una sola imagen no puede captarla, digamos que es una parte de la realidad manipulada técnicamente y también por parte de la persona que lo ve. La imagen se va a codificar a través de una serie de barreras que van a condicionar el mensaje entre el receptor y el emisor.
También tiene que ver con el desarrollo, el ser humano es un ser evolutivo, y no puede ver ciertas imágenes en determinadas edades, lo que supone otra barrera añadida.
La cultura es una barrera más, que también va condicionar la imagen.
Una imagen se distorsiona, un texto no, ya que es univoco, es decir, significa una sola cosa.
Una imagen tiene un elemento polisémico, en función de quien lo mire.
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